Fue a comprar y regresó descalzo: el rugbier que le regaló sus zapatillas a un cartonero

Se llama Javier Alakran y es dirigente y mánager de Floresta Rugby Club. Su nombre, y su robusta imagen subido a una moto, recorre el país por un gesto de enorme solidaridad y empatía por el prójimo: en una calle de Buenos Aires vio a un joven cartonero descalzo y le regaló sus zapatillas, las que llevaba puestas.

“Esto fue el sábado. A la mañana me habían dado el alta médica de un problema en los pulmones por el que había quedado internado. Volví a mi casa y me fui con mi hijo a comprar unos remedios a la farmacia, sobre las calles Rivadavia y Carabobo. Mientras mi hijo entró al local, yo me quedé esperándolo en la moto y veo a un chiquito empujando el carro con una ojota rota y la otra a mal traer. Cuando llegó hasta donde estaba yo, le pregunté cuánto calzaba y me dijo 40. Ahí me bajé y le di mis zapatillas. Se me quedó mirando y le dije que eran de él. Se las puso, me miró con una cara de feliz cumpleaños tremenda, me agradeció un montón y se fue con una polenta tremenda”, le contó Javier al periodista Martín Luciano Insaurralde, de Infobae.

Un peatón vio la escena, la captó con una fotografía y la compartió en Facebook.

“La realidad de ese chico se identifica con la de varios jugadores del club”, dice Javier y describe a su club: “Nosotros desde hace mucho la venimos peleando, la gente del Floresta es así. Los jugadores son los que cortan el pasto, pintan la cancha, juegan y después arman el tercer tiempo. Somos felices de esa manera. Lo que hice con el pibe en la calle es lo que hacemos todos en Floresta. Estoy hace 11 años en el club y siempre fuimos así. El no tener nos da más fuerzas para hacer cosas por los demás. Todo esto nos lo enseñó el rugby. El que viene a Floresta no viene para salir campeón y ser el mejor, el que viene es para hacer amigos, para jugar al rugby, que si se puede se gana, y sobre todo viene sabiendo que va a dejar más de lo que va a ganar”.

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